La rehabilitación acuática se define como la realización de ejercicios
terapéuticos en el agua, utilizando una variedad de posicionamientos
en el Medio acuático. Consiste en tratar a los pacientes en piscinas,
utilizando el agua como medio terapéutico, en especial en el
tratamiento de pacientes con afecciones traumatológicas, neurológicas
y reumatológicas. En medicina del deporte, artroplastías y en
rehabilitación de la columna vertebral, el ejercicio acuático terapéutico
puede ayudar a conseguir una recuperación más rápida de la
funcionalidad. Esta forma terapéutica es beneficiosa cuando se desea
que el cuerpo pase a un estado de ingravidez parcial o total. Se aprove-
cha el poder de flotabilidad y disminución de la gravedad que
confiere el agua para acelerar procesos de rehabilitación, imposibles de
realizar con medios convencionales.
Mediante la propiedad de flotación, se puede disminuir hasta en un
90% el efecto de la gravedad (principio de Arquímedes). En otras
palabras, la fuerza de flotación del agua disminuye la carga axial de
la columna vertebral y de las articulaciones de carga, proporcionalmente
al grado de inmersión. Por ejemplo, estando de pie con el agua a nivel
del tórax, el peso corporal se reduce un 60% en las articulaciones y en la
columna (Prins, 1999). Esencialmente esto da al paciente y al kinesió-
logo, la habilidad de controlar las fuerzas de compresión sobre las
articulaciones, solamente con variar el grado de inmersión. El entorno
acuático permite fortalecer los músculos en una postura funcionalmente
erguida, utilizando el agua como elemento de resistencia (viscosidad).
El hecho de realizar ejercicios locomotores utilizando la resistencia del
agua, mejora la funcionalidad por que el cuerpo se estabiliza a si mismo
contra esa resistencia. Así la autentica ventaja del ejercicio en el agua
radica en su capacidad de ofrecer resistencia especifica en una postura
funcional erecta. Existe un trabajo realizado por Sanders, (1993) en
el que se objetivo un incremento de la fuerza abdominal sin realizar
ningún ejercicio especifico de dicha musculatura. Este es un hecho
importante debido a que el tono abdominal en la patología lumbar
juega un papel fundamental, siendo considerada como una verdadera
faja natural. Esta mejoría fue atribuida a la posición vertical y
dinámica utilizada durante la actividad acuática. En cuanto a la flexibilidad
se objetivaron importantes mejoras en los acortamientos de la
musculatura isquiosural, así como de la movilidad de la columna lumbar.
terapéuticos en el agua, utilizando una variedad de posicionamientos
en el Medio acuático. Consiste en tratar a los pacientes en piscinas,
utilizando el agua como medio terapéutico, en especial en el
tratamiento de pacientes con afecciones traumatológicas, neurológicas
y reumatológicas. En medicina del deporte, artroplastías y en
rehabilitación de la columna vertebral, el ejercicio acuático terapéutico
puede ayudar a conseguir una recuperación más rápida de la
funcionalidad. Esta forma terapéutica es beneficiosa cuando se desea
que el cuerpo pase a un estado de ingravidez parcial o total. Se aprove-
cha el poder de flotabilidad y disminución de la gravedad que
confiere el agua para acelerar procesos de rehabilitación, imposibles de
realizar con medios convencionales.
Mediante la propiedad de flotación, se puede disminuir hasta en un
90% el efecto de la gravedad (principio de Arquímedes). En otras
palabras, la fuerza de flotación del agua disminuye la carga axial de
la columna vertebral y de las articulaciones de carga, proporcionalmente
al grado de inmersión. Por ejemplo, estando de pie con el agua a nivel
del tórax, el peso corporal se reduce un 60% en las articulaciones y en la
columna (Prins, 1999). Esencialmente esto da al paciente y al kinesió-
logo, la habilidad de controlar las fuerzas de compresión sobre las
articulaciones, solamente con variar el grado de inmersión. El entorno
acuático permite fortalecer los músculos en una postura funcionalmente
erguida, utilizando el agua como elemento de resistencia (viscosidad).
El hecho de realizar ejercicios locomotores utilizando la resistencia del
agua, mejora la funcionalidad por que el cuerpo se estabiliza a si mismo
contra esa resistencia. Así la autentica ventaja del ejercicio en el agua
radica en su capacidad de ofrecer resistencia especifica en una postura
funcional erecta. Existe un trabajo realizado por Sanders, (1993) en
el que se objetivo un incremento de la fuerza abdominal sin realizar
ningún ejercicio especifico de dicha musculatura. Este es un hecho
importante debido a que el tono abdominal en la patología lumbar
juega un papel fundamental, siendo considerada como una verdadera
faja natural. Esta mejoría fue atribuida a la posición vertical y
dinámica utilizada durante la actividad acuática. En cuanto a la flexibilidad
se objetivaron importantes mejoras en los acortamientos de la
musculatura isquiosural, así como de la movilidad de la columna lumbar.
Indicaciones
Las indicaciones de la terapia acuática incluyen todas las patologías
que afecten al aparato locomotor en las que deseamos reducir el dolor
, el espasmo muscular, el edema y aumentar el arco de movilidad y
la fuerza muscular. Muchas de estas patologías requieren diferentes
niveles de descarga en tierra. Por ejemplo, tras una lesión lumbar,
los pacientes suelen estar tan doloridos que les impide realizar ejercicios.
Muchos de los ejercicios realizados en tierra bajo el efecto de la
gravedad, tienen el riesgo potencial de incrementar la presión intradiscal,
provocando un incremento del dolor. El uso de la terapia acuática en los
dolores lumbares, concluyen que en el agua los pacientes toleran mucho
antes la realización de ejercicios debido a la ausencia de gravedad
que disminuye la presión intradiscal, el dolor y el espasmo muscular.
Además de los estudios sobre patología de columna existen otros
estudios científicos que demuestran una evolución clínica positiva
en otras patologías como artrosis de rodilla, patologías de hombro
y en ciertas poblaciones especificas como deportistas y tercera
edad. Cabe destacar el caso de un grupo de pacientes intervenidos
de rotura de ligamento cruzado anterior y sometidos a terapia
acuática, mostraron una recuperación más precoz y eficiente que
otro grupo que realizó rehabilitación convencional.
Ciertos estudios encuentran diferencias estadísticamente
significativas en la percepción del dolor al comparar el tratamiento
acuático con la rehabilitación convencional en pacientes con artrosis.
En los pacientes afectos de patología reumática se demostró la utilidad
de la terapia acuática en el incremento de la capacidad funcional
músculo-esquelética. Lo que resulta tras años de experiencia es una clara
disminución de los tiempos de recuperación de los pacientes y por
ende, del costo socioeconómico de sus dolencias. El medio acuático
brinda un ambiente propicio para la reeducación de músculos
débiles y para la práctica y desarrollo de ciertos movimientos y
habilidades motrices. En mi opinión, los movimientos no solo son
más fáciles de ejecutar en el agua, sino que también resultan menos
dolorosos lo cual contribuye a abreviar la duración del período de
rehabilitación. Los pacientes manifiestan sentirse mejor luego
de una sesión y frecuentemente notan progresos después, cuando
realizan las actividades propias de su vida diaria.
Son factibles de ser tratadas mediante rehabilitación acuática:- Escoliosis
- Hipercifosis
- Hiperlordosis
- Trastornos Posturales
- Fibromialgias
- Trastornos articulares
- Pubalgia
- Sacroileitis
- Espondilolistesis
- Artrodesis
- EspondilitisAnquilosante
- Cervicalgia
- Lumbalgia
- Hernias de disco
- Pinzamientos
- Artrosis
- Post quirúrgicos de columna
- Prótesis
- Hemiplejias
- Guillan barre
- Distrofias Musculares
- Fracturas
- Esguinces
- Eesgarros
- Luxaciones-Asmáticos
- Epoc-Parálisis cerebral, etc
LIC. NANCY V. MOLLAR
KINESIOLOGA - FISIATRA
KINESIOLOGA - FISIATRA
FUENTE
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